En mi trabajo hay un gigante...Yo trabajo con un gigante. Casi todas las mañanas y todas las tardes me lo encuentro junto a la puerta del canal. Viste un traje negro, usa bigote, anteojos y una sonrisa que nunca se quita de la cara. Yo mido un metro setenta de alto, y aún así él me saluda diciendo: "Buen día pequeño". Claro, cualquiera es pequeño al lado de un gigante como él. No es gordo ni fofo, sino de proporciones equilibradas. Sus dientes blanquísimos contrastan con su piel oscura y su cabello color ébano. Su traje jamás está arrugado y a veces siento que mi mano desaparece en la suya cuando me despido de él al final del día de trabajo.
- Hasta mañana.
- Hasta mañana -dice él con su sonrisa-. Que descanses pequeño.
Supongo que soy afotunado ¿Cuántas personas son capaces de afirmar que trabajan con un gigante?
Acuario.-